Se utilizan en procesos de lijado y pulido automotriz, especialmente en tareas de preparación de superficies antes de pintar o retocar, y en trabajos de acabado fino.
Cuentan con estructura de grilla que permite una alta capacidad de absorción y permeabilidad. El soporte es de espuma y tela rejilla, el abrasivo es de óxido de aluminio, el aglutinante es resina sintética y la fijación es mediante velcro, lo que facilita su uso en platos de lijado universales.
Son ideales para remover incrustaciones de suciedad, pintura chorreada, piel de naranja y para volver mate superficies pintadas. Se aplican sobre carrocerías, piezas plásticas pintadas y superficies metálicas tratadas.
Ofrecen un trabajo libre de polvillo y sombras, lo que mejora la calidad del acabado. Su diseño permite ahorrar tiempo y dinero al reducir la cantidad de discos necesarios por tarea. Además, su capacidad absorbente y permeable mejora la eficiencia del lijado.